“Mucha fuerza y coraje”, escribió en la postal un hombre a Beatriz y Verónica, de El Salvador; Amalia, de Nicaragua; y Josefa y María, de Ecuador. Ellas son las protagonistas de los cinco casos emblemáticos sobre la violación de los derechos humanos que sufren las mujeres en relación al aborto y los derechos sexuales reproductivos. Sus historias están resumidas en las cuatro postales que el público tomaba de la mesa, en el stand de Mundubat, para enviarles un mensaje de que no están solas.

-¿Qué la motivó a participar?-preguntamos a una ciudadana que aceptó la invitación de unirse a la Campaña.

-Porque no me parece justo. Cada uno es dueño de su cuerpo-, respondió Verónica.

Idea que comparten las responsables de la Campaña. Leire Gutiérrez abordaba a las personas que por distintas razones pasaban por la Plaza Unamuno con una pregunta: ¿Sabes de qué va esta Campaña? Y les mostraba el folleto de color azul, rojo y amarillo que en la portada tenía una frase que captaba la atención de inmediato: #Somostodasnosotras.

“Hemos hecho una investigación sobre casos de mujeres en América Latina, casos reales de víctimas de violaciones que perdieron a su bebé y que hoy tienen penas de cárcel de 30 años. En Ecuador, por ejemplo, solo permiten abortar a las que han sido violadas y presentan retraso mental. De esta forma queda la mayoría desprotegida. Por eso le pedimos que escriba en las postales un mensaje de apoyo que después mandaremos a las organizaciones de mujeres en esos países para que cambien la legislación,” explicaba Leire a las mujeres y hombres, quienes escuchaban atentamente y después se dirigían a elegir la postal en euskera o castellano.

Sus miradas se posaban en las cuatro postales. Cinco figuras femeninas los miraban de frente con sus expresivos ojos negros. Alrededor de ellas símbolos del poder patriarcal que les ha castrado su ser: una paloma enjaulada, el mazo del juez, el rosario y la cruz de las iglesias, las manos que las señalan, pero también descubrimos sus manos alzadas pidiendo respeto o tomando el mazo o las llaves de sus vidas. Sus pulmones y sus matrices palpitan en busca de justicia.

“Jamás desesperes, aun estando en las más sombrías aflicciones, pues de las nubes negras cae agua limpia y fecundante”, escribió en su momento el filósofo y escritor Miguel de Unamuno…Pensamientos que ahora se unen a la avalancha de solidaridad que se fortalecerá en los diez días que dure la Campaña el Derecho a decidir de las mujeres #Somostodasnosotras #Emakumeguztiokgara.