Viernes, 29 de junio de 2012. Pinchad aquí.
Nosotros, diputados del Parlamento Europeo, queremos manifestar nuestra profunda preocupación frente al Golpe de Estado contra el presidente democráticamente elegido, Fernando Lugo.
El Presidente Fernando Lugo, fue destituido por medio de un juicio político promovido por el Congreso de Paraguay - mayoritariamente controlado por la oposición - otorgándole menos de 24h para prepararse y tan sólo dos horas para presentar su defensa. Ninguna prueba que justificaba las acusaciones fue presentada en el libelo acusatorio por los acusadores.
Los abogados del presidente pidieron más tiempo para poder presentar una defensa adecuada, pero esta fue negada.
Al no respetar el debido proceso, es claro que las esenciales normas democráticas fueron violadas y esto nos hace creer que lo que se llevó a cabo en Paraguay fue en efecto un Golpe de Estado Parlamentario. La destitución del presidente había sido planeada desde tiempo atrás por la oposición, quienes estaban tan solo esperando una oportunidad para llevarlo acabo (según revelan los informaciones enviadas en el 2009 desde la embajada de EE.UU. en Paraguay2).
El Vice-Presidente de F. Lugo, quién fue nombrado inmediatamente por la oposición parlamentaria como «nuevo presidente» había amenazado de utilizar el mismo procedimiento de juicio político, bajo justificaciones varias.
La UNASUR, la OEA, el MERCOSUR, la CELAC y los países del ALBA, han condenado el juicio político contra el presidente constitucional del Paraguay, Fernando Lugo. Como parlamentarios europeos, nos unimos a esta condena, y llamamos a nuestros respectivos gobiernos y a la UE a tomar las medidas necesarias para suspender los acuerdos de cooperación con el Paraguay, hasta que no vuelva el orden democrático y el Estado de Derecho.
Invitamos por lo tanto a los gobiernos europeos, que se han negado a condenar este Golpe de Estado, a reconsiderar esta posición inaceptable para la democracia, y en particular para países como Paraguay que han vivido durante tantos años bajo regimenes autoritarios. Hacemos también un llamado a la Comisión Europea para que condene ejemplarmente este Golpe de Estado, y suspenda cualquier tipo de cooperación e inicie una investigación bajo al régimen del sistema de facilidades arancelarias SGP.
Manifestamos nuestra profunda solidaridad con el pueblo paraguayo, que se encuentra resistiendo pacíficamente frente a esta ruptura violenta del Estado de Derecho.
Pedimos a la Alta Representante de la UE, Catherine Ashton, que condene fuertemente este ataque a la democracia, y que envíe una misión internacional para clarificar las responsabilidades en la masacre de Curuguaty.
Esperamos que la Unión Europea tome todas las medidas necesarias para garantizar el restablecimiento del orden constitucional y la Soberanía Popular, y apoye las organizaciones regionales que rechazan el gobierno de facto y buscan una solución pacífica a esta crisis.
Jürgen Klute, MEP, Alemania
Gianni Vattimo, MEP, Italia
Jean-Luc Mélenchon, MEP, Francia
Marisa Matias, MEP, Portugal
Martina Anderson, MEP, Irlanda
Nikolaos Chountis, MEP, Grecia
Ivo Vajgl, MEP, Slovenia
Amelia Andersdotter, MEP, Suecia
Barbara Lochbihler, MEP, Alemania
Lothar Bisky, MEP, Alemania
José Bové, MEP, Francia
Bart Staes, MEP, Bélgica
Conerlia Ernst, MEP, Alemania
Raul Romeva, MEP, España
Gabriele Zimmer, MEP, Alemania
Ana Miranda, MEP, España
Helmut Scholz, MEP, Alemania
Satu Hassi, MEP, Finlandia
Sabine Lösing, MEP, Alemania
Francisco Sosa Wagner, MEP, España
Alda Sousa, MEP, Portugal
Marie-Christine Vergiat, MEP, Francia
Yannick Jadot, MEP, Francia
Martin Häusling, MEP, Alemania
Miloslav Ransdorf. MEP, República Checa
Franziska Keller, MEP, Alemania
Jean Lambert, MEP, Reino Unido
Ulrike Lunacek, MEP, Austria
Catherine Grèze, MEP, Francia